Pedro Flores

El pasado viernes, 17 de noviembre, se anunciaba el fallo del XXVIII Premio Nacional de Poesía José Hierro, que recayó en esta edición en el poeta grancanario, Pedro Flores, con su poemario Coser para la calle.  Este certamen  es uno de los galardones más importantes de poesía que se otorgan en España. Patrocinado por la Universidad  Popular José Hierro de San Sebastián de los Reyes de Madrid,  tiene una dotación económica de 9.000 euros. También tiene en su haber este premio la poeta Elsa López, que lo ganó en 2001 con Mar de amores. En esta edición, el Jurado estuvo compuesto por Ángel García López, Joaquín Benito de Lucas, Pureza Canelo, Olvido García Valdés y Antonio Hernández. Flores cuenta en su haber con otros  galardones como el Ciudad de Las Palmas, Tomás Morales, Gil de Biedma, Fray Luis de León, Pedro García Cabrera, y Ciudad de Santa Cruz de La Palma. Sin embargo, se muestra como un hombre sencillo, que huye de presumir de sus logros y defender por encima de todo la poesía. Y si hay algo que hay que destacar de este autor y, que es bastante inusual hoy en día, es que no hace uso de las redes sociales. Precisamente este viernes, 24 de noviembre, el poeta llevará a cabo una lectura comentada de su libro Diario del Hombre Lobo y otros poemas carnívoros en el Palacete Rodríguez Quegles de Las Palmas de Gran Canaria. La cita será a las 19.30 horas. DRAGARIA habla con el poeta sobre el galardón y la poesía.

⇒ ¿Qué significa para ti este nuevo premio, uno de los galardones más importantes de poesía que se otorgan en España y con un buen montante económico?  

Efectivamente este es un premio prestigioso, para mí es un honor recibirlo, sobre todo en la medida en que el Jurado lo componen autores que uno respeta y admira, además de por su seriedad o duración en el tiempo, entre otras cosas. Los premios son importantes sobre todo por ello, por la solvencia literaria de los que te lo conceden. Evidentemente eso no significa que tu trabajo sea superior al de nadie, sino que un jurado concreto opta por aquello que va en la dirección de su propia sensibilidad.

«Los premios son importantes sobre todo por la solvencia literaria de los que te lo conceden, pero eso no significa que tu trabajo sea superior al de nadie»

⇒ ¿La poesía debe seguir siendo como la bala que mató a Kennedy, tal y como señala el poema que da título a uno de tus libros más importantes editado en 2010?

Siempre he mantenido la vigencia de lo misterioso en la poesía, eso es una metáfora más o menos afortunada para apoyar esa teoría; lo inexplicable, lo inesperado, incluso, en cierto sentido, lo violento, son ingredientes que dotan de potencia a la poesía, y esta, entre otras cosas, a mi modo de pensar, debe ser potente.

⇒ Por cierto, hablando de este libro, el joven que ganó el último Premio de Poesía Ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, José Manuel Jaén, se quedó impresionado con tu obra y aseguró que usaría esta idea para su próximo poemario en honor a ti. ¿Qué te parece?

Siempre hay insensatos que se impresionan con cualquier cosa, bueno, es una broma, es un honor para mí que otros poetas puedan sacar algún partido, algún dialogo fértil con mi propia poesía. En el caso de José Manuel Jaén, al que no conozco personalmente, le agradezco este interés, que es mutuo por lo que conozco de su obra, en espera del libro ganador del premio, que por algo habrá ganado.

⇒ Explícanos brevemente esa idea tuya de la poesía ficción

«Por encima, o por debajo, de la verdad, que es algo relativo y, a veces, sobrevalorado en literatura, está la verdad poética»

Bueno, entiendo que la idea ni es nueva ni es mía. Simplemente repito algo bastante obvio, que es el derecho de la poesía al ejercicio de la ficción. Hay quien piensa que la poesía es el mero ejercicio de la sentimentalidad o de la sinceridad. Por encima, o por debajo, de la verdad, que es algo relativo y, a veces, sobrevalorado en literatura, está la verdad poética, el deber y derecho de la poesía de ejercer la imaginación. El mero ejercicio de la sinceridad no es poesía.

⇒ ¿Es la poesía en un género minoritario o ahora, con las redes sociales que todo el mundo se considera poeta, es más popular que nunca? 

Si viviéramos en una sociedad donde la poesía, la buena poesía, fuera un género mayoritario estaríamos hablando de otro tipo de sociedad, no sé si mejor, pero al menos más lúcida. Lo que ocurre desde mi modesto punto de vista es que vivimos momentos de trivialización de la escritura de poesía; no sólo en las redes sociales, mundo que desconozco profundamente y en el que no participo, sino también en la edición de libros de poesía. Asistimos a un intento de implantación artificial de cierto tipo de autores que escriben en verso, pero no escriben poesía, y que tampoco la han leído. Ciertas editoriales tratan de ganar un mercado, joven normalmente, con textos que, en general, resultan bastante empalagosos.

⇒ Has escrito  a la soledad, la rebeldía, el amor, la desobediencia, salir rana, esa trilogía a la Biblia… ¿Qué temas quedan en el tintero de Pedro Flores?

«ciertas editoriales tratan de ganar un mercado, joven normalmente, con textos que, en general, resultan bastante empalagosos»

Los temas de la poesía universal son tres, si es que se puede hablar de temas: la muerte, el amor, el tiempo y su dictadura, además del propio hecho de la creación. Uno habla siempre de lo mismo, busca una excusa para nombrar algo en gran medida inefable. Quizá la poesía no tenga que hablar de nada, ha de ser o no ser. Leemos, por ejemplo a Vallejo, probablemente el autor más influyente y definitivo de la poesía en nuestro idioma para las generaciones posteriores, y no necesitamos su absoluta comprensión intelectual, que puede ser vaga y cambiante en el tiempo, para asumir la grandeza estética y humana de su verso.

⇒ Tienes muchos poemas dedicados a otros poetas, como el propio Vallejo, Miguel Hernández, Ernesto Cardenal… ¿crees que no reconocemos suficientemente a los poetas?

No sé si reconocemos suficientemente a los poetas, o si lo merecen, desde luego no es ese el objetivo, por así decirlo, de los buenos poetas. En mi caso yo simplemente les robo, pero como soy un ladrón agradecido dejo patente el rastro del delito.

«No creo que escribir una novela sea dar un salto, si lo planteas en un sentido, digamos, de jerarquía literaria»

⇒ Para terminar en tu obra cuentas con más de una veintena de libros, no solo hay poesía, hay relatos, cuentos infantiles… ¿Te has planteado alguna vez dar el salto y escribir una novela?

No creo que escribir una novela sea dar un salto, si lo planteas en un sentido, digamos, de jerarquía literaria. También entramos con ello en el viejo y enconado debate de las fronteras entre los géneros. Yo soy un empedernido lector de narrativa, de novelas también, una buena novela, y a veces también alguna mala, es una estructura compleja, su lectura debe ser una experiencia gozosa. La poesía plantea, otros retos y habilidades, pero han de coincidir en ese gozo para el lector.


Pedro Flores (Las Palmas de Gran Canaria, 1968) ha publicado los títulos de poesía Simple Condicional, Memorial del olvido, La vida en ello, Nunca prendimos París, El complejo ejercicio del delirio, El ocio fértil, La poética del faquir, Diario del hombre lobo, Al remoto país donde sonríes, Fieras sin música, Con la vida en los talones (Antología poética 1994-2004), Memorias del herrero de Nod, Al este del desdén, En los planes de nadie, Preparativos para la conquista de Brunei, La poesía debe ser como la bala que mató a Kennedy, Donde príncipes y bestias, El hombre que bebió con Dylan Thomas y otros sonetos, El último gancho de Kid Fracaso, Como pasa el aire sobre el lomo de una bestia y recientemente Los versos perdidos del contramaestre del arca. En 2016 la editorial Renacimiento publica bajo el título Salir rana una antología poética del autor prologada y seleccionada por el poeta Vicente Gallego. Ha sido finalista del Premio Nacional de la Crítica por La poesía debe ser como la bala que mató a Kennedy y, entre otros, ha ganado el Ciudad de Las Palmas, Tomás Morales, Gil de Biedma, Fray Luis de León, Ciudad de Tudela, Pedro García Cabrera, Isaac de Vega, Ciudad de Santa Cruz de la Palma, Domingo Velázquez, Esperanza Espínola, Antonio Oliver Belmás, 650 Aniversario de la Fundación de Telde, Universidad de Las Palmas y CajaCanarias. Sus poemas han sido musicados por Andrés Molina en el espectáculo Los hombres que bebieron con Dylan Thomas, grabado en directo en el teatro Leal de la Laguna. Ismael Serrano y Said Muti también han interpretado letras suyas. Se han publicado sus poemas en varios países europeos y latinoamericanos y ha colaborado en España, entre otras con las revistas literarias 21 versos, Cuadernos del Matemático, Turia, Telegráfica, Gaya Ciencia, Piedra de MolinoDRAGARIA y en Suiza con Mundo Hispánico.

- Publicidad -