Aunque nacida en Asturias, Anabel Villoria lleva muchos años viviendo en Gran Canaria. Adora a Galdós y, de hecho, se suma al número de personas que han escrito sobre la vida del insigne escritor. Activa en varios grupos literarios, recopila su participación en el Club de los Retos de Dácil, quizá con la intención de publicarlos. Alegre, dicharachera y siempre con ganas de aprender de los demás no es del todo consciente de lo que puede aportar a nuestras letras canarias.
Tres claves de tu último trabajo
Estoy en dos proyectos. Uno, un poemario del que tengo seleccionados 47 poemas. Como no tengo prisa espero a tener seleccionados por los menos 65 o 75 y después ya veremos si lo publico o lo guardo para mis amistades. Y el más ambicioso, osado o inconsciente, como quieras llamarlo, es una novela sobre Benito Pérez Galdós. Trata sobre sus amores y sobre su marcha de la isla, pero sobre todo de como yo me lo imagino. Tenía esa socarronería canaria que a mí me agrada, y hasta me parece que los escritores y escritoras que la tienen, tienen bastante terreno ganado para ser buenos novelistas. Con esta novela haré lo mismo que con el poemario, si no me convence, lo dejaré para mis amistades y familia. Y si me lo permites, te hablaré de una recopilación de relatos inspirados la mayoría en los textos del Club de los Retos de Dácil.
¿Qué autor o autora te inspira?
No podría decir solo uno. Imposible. No obstante, te diré alguno de esa larga lista. De mujeres, Almudena Grandes, me parece la más galdosiana que hay en la actualidad; Julia Navarro; Ángeles Caso, no solo porque es asturiana, sino porque me parece que se documenta bastante antes de ponerse delante del teclado; María Jesús Alvarado y la incluyo en novela y poesía. De poesía estoy descubriendo, por mediación de su hermana, a Maribel Lacave. Pero tengo muchas que no nombrarlas ahora me parecería una injusticia. De hombres los clásicos empezando por el segundo más grande, que para mi gusto es el más, Don Benito. Más cercanos a nuestro tiempo, sin lugar a dudas el que más me marcó es Cortázar. Kafka me parece un genio. García Márquez se me hace imprescindible leerlo. Javier Marías, Emilio González Déniz, Santiago Gil y no porque sea mi maestro, sino por su sensibilidad a la hora de escribir. Me parece que tiene las manos de pianista en el teclado y el oído de músico. Muchos. Como ya te dije, no nombrarlos a todos me parece una injusticia, así que me perdonen.
Un poema, una novela, un cuento
— Un poema: El ser uno, de Juan Ramón Jiménez. Es un poema que, leyéndolo dos veces, a la tercera lo haces tuyo.
— Una novela: Rayuela, de Cortázar. Son dos libros en uno. Una forma diferente de escribir, de implicar al lector. Y por cierto, no conocí hombre más tonto que Horacio Oliveira. Luego no sé a quién se lo escuché que La Maga estaba inspirada en una mujer que conoció en París.
— Un cuento: De noche, de Kafka. Te podría haber dicho La metamorfosis, que es una obra maestra, pero me inclino por De noche. ¿Quién no tuvo su particular noche? Y no hablo de diversión.
Una obra de teatro, un guión cinematográfico
— Una obra de teatro: Cinco horas con Mario, de Delibes. No sé si porque Lola Herrera interpretó a la viuda que tan magníficamente desnudó el alma de la sociedad, o porque el autor de la novela contemporánea es un grandísimo entre los grandes.
— Un guión: Casablanca, de Michael Curtiz. Me gusta mucho esa película y, aunque el final es el adecuado, me hubiera gustado que Bogart se fuera con Ingrid Bergman.
Proyectos
Estoy escribiendo sobre Benito Pérez Galdós. Entre realidad y ficción. Y también, un poemario.
¿Qué personaje de DRAGARIA serías?
Me gustaría tener la determinación y liderato de Arsínoe IV. El valor y la valentía de Mariana Pineda, la inteligencia de Clara Campoamor y la sensibilidad de Gabriela Mistral. Todo ello sería una utopía en mi caso, pero por soñar sigo escribiendo.
Anabel Villoria Roza (Gijón) cursó talleres literarios en Ámbito Cultural de El Corte Inglés de Las Palmas de Gran Canaria, con Santiago Gil, Alexis Ravelo, José Luis Correa y Pedro Flores como tutores. Publicó su primer trabajo en 2011, el libro juvenil Los elegidos (Ediciones Atlantis). En 2013, en el marco de una cooperación de autonomías representando a Canarias, publicó Golpe a la corrupción (Ediciones Atlantis).