Nació en Moya, «cuna de nuestro ilustre poeta Tomás Morales», recuerda. Félix Martín Arencibia ha repartido su carrera literaria entre la prosa, la poesía y la literatura infantil y juvenil. Vivió parte de su adolescencia en Montaña Cardones, donde empieza a enraizar su poesía: «Dicha residencia en parte ha resultado la patria ficticia de mi posterior escritura», señala. Posteriormente, animado por los escritores Víctor Ramírez y Rafael Franquelo, se animó a publicar. También influido por la narrativa de autores japoneses como Murakami, «o por supuesto parte de la literatura nórdica y sobre todo el boom sudamericano», escribe sus primeros libros de ficción. «Entre tanto se desarrolla la poética y las colecciones de relatos para adulto, detecto la necesidad de realizar historias infantiles, donde se muestre el medio ambiente, la historia, el habla, su gente, sus mitos a veces inventados», confiesa. Es, pues, uno de esos escritores que navegan entre varios géneros dejando un importante legado literario.
Tres claves de tu último trabajo
La última creación literaria se titula Bajo sueños de volcán (Editura en Iasi, 2016), editado en Rumanía. Se trata de una antología de relatos donde el surrealismo, el humor y la reivindicación de la propia esencia son claves. Existen diversas influencias de las diferentes lecturas a lo largo de casi veinte años y de las más recientes. Anteriormente publico la novela Voces desde Timanfaya (Idea, 2013), que parte de la muerte de César Manrique, a la que atribuyo una trama de un thriller que en el que se intenta buscar a los causantes del crimen. Se desarrolla en Lanzarote, Gran Canaria, Tenerife, Madrid, París… La temática es variada: social, ecológica, política, económica, mafiosa… El hecho de reseñarla aquí es la falta de promoción que por una serie de circunstancias no tuvo en ese momento.
¿Qué autor o autora te inspira?
No es fácil definir un único autor como inspirador de una obra. Son extensas lecturas: boom sudamericano, los rusos del siglo XIX, los estadounidenses del finales del diecinueve y principio del veinte, como John Steinbeck y William Faulkner. El inconfundible Graham Green. Voy a tener que dar dos o tres nombres como más decisivos de iniciales lecturas: García Márquez, Juan Rulfo y el más constante de todos, Vargas Llosa, a pesar de las divergencias ideológica. Si me fuera a inclinar por uno, el elegido sería nuestro García Márquez. De los actuales, Paul Auster es quizás el más influyente. Junto a ellos Stieg Larsson, Carlos Ruiz Zafón. Entre las mujeres, la insuperable Virginia Woolf, Margaret Mazzantini, Isabel Allende, Toni Morrison… Así podría seguir enumerando, pero se haría un tanto extensa la lista.
Un poema, una novela, un cuento
— Un poema: El niño yuntero, de Miguel Hernández.
— Una novela: Crónica de una muerte anunciada, de Gabriel García Márquez.
— Un cuento: Los campesinos, de Antón Chéjov.
Una obra de teatro, un guión cinematográfico
— Una obra de teatro: El jardín de los cerezos, de Antón Chéjov.
— Un guión: La piel que habito, con guión de Pedro Almodóvar (basado en la novela Tarántula de Thierry Jonquet).
Proyectos
Editar la última novela juvenil de la Pandilla Jeribilla, de la colección Laurisilva de Anroart, referida a las islas de La Gomera y Fuerteventura. La historia, la cotidianidad, el paisaje, la idiosincracia de los personajes se entremezclan en el argumento de dichas historias; publicar un nuevo poemario y la posibilidad de ampliar la serie real-fantástica de la colección Laurisilva.
¿Qué personaje de DRAGARIA serías?
Entre los personajes de la literatura real-fantástica de Canarias se encuentran los de Luis Pérez Aguado. En parte son de alguna manera el inicio del género actual. Así, personajes como Zarapito, la Pandilla del Chorizo Frito… Pero la colección Laurisilva de mi Pandilla Jeribilla se adelanta a la pandilla de Pérez Aguado. Se trata de un grupo de niños que recorren las islas Canarias entre el mundo de la fantasía y la realidad. Aparecen personajes fantásticos donde se mezclan personajes más realistas como la Tortuga Pétrea o los dragones de Timanfaya.
Félix Martín Arencibia (Moya, Gran Canaria, 1951) pasó gran parte de la infancia, adolescencia y juventud en Arucas hasta su traslado a Las Palmas de Gran Canaria y por último a Satautey (Santa Brígida). Ha ejercido como profesor de primaria durante 35 años. En ese contexto nació su vocación literaria, en el intento de hacerles desarrollar el interés por la literatura y fomentar su creatividad a los alumnos más jóvenes. Durante veinte temporadas presenta y dirije en Radio Guiniguada y Radio Sataute programas culturales y literarios: Bejeke y Bicácaro Cultural. Ha colaborado en las páginas culturales y de opinión de Diario Las Palmas, Canarias7, La Gaceta de Canarias, Lancelot o La Gaceta de Santa Brígida, así como en los digitales Canariasahora, El Guanche, Arucas Revista Digital, Telde Actualidad, GHTC, San Borondón o Revista Tara, además de en las revistas literarias Anarda, la rumana HLC y la italiana Isla Negra. Ha publicado los poemarios Verdades verdes desde el palmeral de Satautey (1991), Vuelos de palmera (1992), Bicácaro de amor apasionado (2007, prologado por Luis León Barreto y Rosario Valcárcel) y Muestrario de esperanzas ciertas (2014, en rumano). En narrativa destacan sus obras Ahínco (1998), Raíces de volcán dormido (2009), Voces desde Timanfaya (2013) o Bajo sueños de volcán. En Literatura infantil y juvenil crea la Pandilla Jeribilla y ha publicado Misterios en las raíces del volcán (2008), Los extraños dragones de Timanfaya (2010), Vuelo mágico sobre las islas (2011) y Acampada en el túnel del tiempo (2012). Su artículos de opinión en medios informativos han sido recopilados en Desde el Guiniguada. Correos a los amigos (2009). Ha participado en varias antologías en grupos poéticos como Uni-Verso y Los poetas canarios Arcadia. Entre ellas están Poesías de las islas Canarias (1999), Cuando el amor se hace verso (2000), Canto a las islas Canarias (2001), Minitextos comprometidos, Antología de poetas la Arcadia I, Antología de poetas Arcadia II, Antología de poetas la Arcadia III. y otras de Nace (Nueva Asociación Canaria para la Edición).
