Esta filóloga opina que para ser escritor hay que leer y «los clásicos universales. No basta con leer un par de novelas y una docena de entradas en blogs». Opina que si más gente leyera a los clásicos, «menos personas se atreverían a publicar tan rápido sus escritos. Tendrían más conciencia de lo que es la gran literatura y, por tanto, también serían menos osados. Yo solo he publicado un libro de poemas, Almario, y dudé mucho antes de hacerlo. Soy consciente de que mi poesía jamás estará a la altura de los clásicos, y eso me hace tener prudencia, mantener los pies en el suelo y no llenarme de vanidad». A pesar de su juventud, tiene las cosas muy claras, y sostiene que separar Canarias de la literatura universal «es un absurdo porque vivimos en un mundo globalizado y la literatura no tiene etiquetas geopolíticas».
Tres claves de tu último trabajo
Mi último trabajo es el libro La soledad y el tiempo, que recibió un accésit en el Premio Félix Francisco Casanova de poesía y se publicará en octubre. Diría que las tres claves o los tres temas del poemario son el desamor, el paso del tiempo y la soledad.
¿Qué autor o autora te inspira?
Me inspiran todos los autores que leo, pero si tuviera que citar a algún autor cercano, diría que la poesía de Elsa López y de Pino Ojeda me han emocionado especialmente.
Un poema, una novela, un cuento
— Un poema: cualquiera del libro Como el fruto en el árbol, de Pino Ojeda.
— Una novela: Una gasa delante de mis ojos, de Elsa López.
— Un cuento: cualquiera de Chéjov o de Guy de Maupassant.
Una obra de teatro, un guión cinematográfico
— Una obra de teatro: cualquiera de Angélica Liddell.
— Un guión: adoro la película El hombre que mató a Liberty Valance, de John Ford. El guion se basa en un cuento de Dorothy M. Johnson, la mejor autora de western de todos los tiempos. En cuentos de su autoría se han basado otras películas como Un hombre llamado Caballo, o El árbol del ahorcado, por citar algunas de las más conocidas.
Proyectos
Mi único proyecto es terminar la tesis doctoral que estoy escribiendo. Trata sobre Pino Ojeda y la revista Alisio. Hojas de poesía, que ella fundó y dirigió entre 1952 y 1955. En ella tuvieron cabida 33 voces: algunas consagradas y otras casi desconocidas; algunas de ciudades céntricas y otras de las periferias geográficas; voces de hombres y de mujeres; voces correspondientes a personas con ideologías diversas, conviviendo en el papel. Merece la pena rescatar del olvido esta revista. La primera reflexión que nos ofrece es que los manuales de literatura no lo recogen todo, que lo que sabemos de la literatura española del siglo veinte está incompleto. Esta y muchas otras revistas poéticas dibujan un panorama distinto, más inclusivo. Ofrecen la visión de una realidad cultural más objetiva y más completa.
¿Qué personaje de DRAGARIA serías?
Creo que no sería ningún personaje. Nunca he anhelado ser otra persona, y mucho menos un personaje. Me gusta mi vida tal y como es.
Covadonga García Fierro (Tenerife 1992) es graduada en Lengua y Literatura, máster en Teoría e Historia del Arte y Gestión Cultural. Ha recibido los premios de poesía Dulce María Loynaz (2013), Yolanda Sáenz de Tejada (2014) y Bohemia Pulido Salazar (2015). También obtuvo el premio de investigación histórica Antonio Rumeu de Armas (2016). Actualmente realiza una tesis doctoral de la figura de Pino Ojeda, y colabora con la revista Fogal en la modalidad de ensayo. Es autora del libro de poemas Almario (Ediciones La Palma, Madrid, 2015). Actualmente es correctora en el Parlamento de Canarias.