Cuando un poeta publica su libro ya deja de ser suyo, pasa a pertenecer a sus lectores». Tina Suárez Rojas, poeta, parece coincidir con el poeta:
«Hasta que el pueblo las canta,
las coplas, coplas no son,
y cuando las canta el pueblo,
ya nadie sabe el autor».
El corazón de la escritora es un cubo de Rubik desordenado, y bajo esa premisa acude este viernes al Sillón de la Librería Canaima para presentar su nuevo trabajo, decimotercero en una producción que comenzó hace ya dos décadas: «Sólo espero y deseo que sus poemas provoquen una mínima sacudida, algún tipo de conmoción estética e intelectual que haga de la lectura un acto comunicación que no resulte indiferente». Trayectoria que, sin embargo, no asume como balance, sino como tránsito: «La madurez siempre estará en el libro aún no escrito. Yo me cuestiono continuamente y desconfío de lo que escribo. La autocomplacencia emborracha a los poetas y termina asesinándolos.»
Será la antesala de una noche mágica, la de San Juan, cargada también de reminiscencias líricas. Magia y poesía, pues, para quienes se sumen a un encuentro en el que la autora desgranará las claves de su universo creativo y de un poemario que ella misma define como «un punto y seguido» en su manera de concebir la poesía: «Huyo de las fórmulas y los artificios que aspiran a trascender el texto poético sin decir nada. La mía no es una poesía de mecánicas celestes».
Es una poesía cómplice: «Busca el guiño intertextual y culturalista con el lector. Creo en un lector culto —o con deseos de serlo— del que jamás subestimo su comprensión lectora», en la que Suárez no escatima recursos ni es ajena a esa dimensión lúdica que subyace en toda creación: «Sigo apostando por la experimentación lingüística porque el nuestro es un idioma fascinante, muy rico, muy flexible y que da mucho juego. Y a mí me gusta jugar, al fin y al cabo, la poesía es ante todo, un ejercicio de lenguaje».
«me gusta jugar, al fin y al cabo, la poesía es ante todo, un ejercicio de lenguaje»
«Mi corazón es un cubo de Rubik desordenado resulta, en efecto, un libro poliédrico y multicromático», reza en los créditos del poemario: «Las seis caras del cubo se corresponden con los seis colores que estructuran este libro». Una obra en la que podemos encontrar risa y desolación, ironía y divertimento, mito y antimito, trascendencia y cotidianidad, psique y verbo… pero, sobre todo, poesía.
La cita es este viernes, 23 de junio a las 20.00 horas, en la librería Canaima.
Tina Suárez Rojas (Las Palmas de Gran Canaria, 1971) es licenciada en Filología Hispánica y profesora de Lengua Castellana y Literatura. Es autora de Huellas de gorgona (Premio de Poesía Tomás Morales 1996), Pronóstico reservado (Premio Internacional de Poesía Ciudad de Las Palmas 1997), Una mujer anda suelta (Premio Internacional de Poesía Gabriel Celaya 1999), Que me corten la cabeza (2000), El principio activo de la oblicuidad (Premio Carmen Conde de Poesía 2002), La voz tomada (2003), Los ponientes (Premio Internacional de Poesía Odón Betanzos 2004), Las cosas no tienen mamá (2008), Blas y Catalina tras el Genio de la Ciencia (2010), Brevísima relación de la destrucción de June Evon (2013), Delirografías de un pequeño Dios (2014) y Así habló Sara Trasto (2014). Ha participado en recitales poéticos y revistas literarias nacionales e internacionales en las que ha sido traducida al italiano y al portugués.